
Nueva York/27 de noviembre de 2017/Publicado en bez.es
Después de repetir una y otra vez que iba a «drenar el pantano» de Washington de personas cercanas a las élites y al poder económico, Donald Trump sondea a antiguos ejecutivos de Wall Street para ocupar los puestos económicos clave de su Administración.
Todos ellos han pasado por su oficina de transición de la Torre Trump o por el campo de golf de Bedminster (Nueva Jersey) donde Trump se ha entrevistado con los candidatos a ocupar los puestos clave de su gabinete. Ninguno de ellos tiene en sus manos todavía la confirmación de su destino, pero sus nombres han puesto de manifiesto que el presidente de EEUU contará con veteranos de Wall Street para posiciones clave de la Casa Blanca.
Un gesto contrario al proteccionismo económico que Trump ha defendido durante la campaña electoral. Estos son los nombres y los perfiles que baraja el presidente electo de Estados Unidos para dirigir el Tesoro y el departamento de Comercio.
Wilbur Ros, el multimillonario
Su nombre está en las quinielas para ocupar la Secretaría de Comercio. Ross, de 78 años, trabajó durante 25 años en la banca Rothschild Inc y fue uno de los encargados de gestionar su quiebra tras el crash bursátil de 1987. En 2000, fundó su propia firma de inversiones WL Ross & Co y cuenta en la actualidad con un patrimonio neto valorado por la revista Forbes en 2.900 millones de dólares con intereses en la industria del acero, del carbón y el petróleo.
Especialista en la compra y reestructuración de empresas con problemas, Ross se unió a la campaña de Trump como asesor en asuntos económicos y se le considera el elemento clave para las políticas del presidente electo contra los acuerdos comerciales que ambos consideran dañinos para los intereses de Estados Unidos. No es la primera vez que interviene en política. El multimillonario ya colaboró con el exalcalde de Nueva York y fiel a Trump, Rudolph Giuliani en su programa de privatización de empresas.
El candidato, también coleccionista de arte, es un claro ejemplo de las élites de la Costa Este de EEUU. Después de la conversación de media hora mantenida con Trump, Ross anunció su nombramiento como «ministro» de comercio, situación que fue puesta en reserva después por parte del equipo de transición del presidente electo.
Linda McMahon, la reina de la lucha libre
Otra de las caras que suena para la Secretaría de Comercio es la de Linda McMahon. Esta acaudalada mujer de 68 años fundó y dirigió durante casi tres décadas la empresa World Wrestling Entertainment (WWE), gigante de la lucha libre en EEUU. McMahon y su marido, Vince McMahon, hicieron que WWE pasará de ser una compañía regional a una empresa pública de facturación millonaria.
Viejos amigos de Trump, le apoyaron desde su elección como candidato republicano y fueron unos de los principales donantes de su campaña con una aportación de seis millones de dólares. El presidente electo lleva muchos años conectado al mundo de la lucha libre y famosa es su aparición en una pelea en 2007, donde simuló que tumbaba a Vince McMahon. En 1988 y 1989, el espectáculo de la Wrestlemania se celebró en el Trump Plaza de Atlantic City y en 2013 fue nombrado miembro del Salón de la Fama WWE.
En 2009, viró su carrera a la función pública e intentó en dos ocasiones sin éxito convertirse en senadora de EEUU por Connecticut. Ahora opta a entrar en la alta política por la vía de la amistad.
Jonatan Gray, el joven inversor
Su nombre se baraja como secretario del Tesoro, institución encargada de acuñar la moneda y de gestionar la Hacienda pública. Jonathan Gray, de 46 años, es el candidato más joven a ocupar un lugar destacado en la Administración Trump y es en la actualidad el jefe de la división inmobiliaria del banco de inversiones Blackstone.
Su nombramiento podría suponer un conflicto de intereses para el presidente electo, ya que él es el responsable de la cartera hotelera de Blackstone, una de las mayores del mundo y propietaria de numerosos establecimientos en competencia con los de Trump.
En 2007, bajo la supervisión de Gray, el bando de inversión compró los hoteles Hilton por 26.000 millones de dólares, los sacó de la bolsa para retornarlos a cotizar hace tres años. La cartera tuvo el año pasado un valor estimado de 135.000 millones de dólares. La incógnita está ahora en si Gray está disponible para sumarse al gabinete de Trump.
Steven Mnuchin, exGoldmansachs
El presupuesto público estaría con él en manos de la élite de Wall Street. Steven Mnuchin, de 53 años, es hijo de un alto ejecutivo de Goldman Sachs y estudió en la universidad de Yale. Después de graduarse, trabajó durante 17 años en el gigante de las finanzas como gerente de fondos de cobertura. Uno de sus lados más polémicos es el de haberse enriquecido con las hipotecas ‘subprime’, origen de la crisis financiera de 2008, mediante la compra de una entidad en quiebra para la ejecución posterior de los préstamos a sus clientes.
Mnuchin mantiene relaciones con Trump desde hace 15 años y dirige en la actualidad su propia empresa de inversión, Dune Capital Management. Su elección le convertiría en el tercer exbanquero de Goldman al frente del Tesoro de EEUU, desde los 90, tras el paso de Robert Rubin y Hank Paulson, elegidos por Bill Clinton y George W. Bush, respectivamente.
David McCormick, el militar
Otro de los competidores para dirigir el Tesoro es David McCormick, actual jefe de fondos de cobertura de la firma de inversión privada Bridgewater Associates. McCormick se graduó en la emblemática Academia Militar de West Point y sirvió en la primera guerra del Golfo. Es el único candidato con experiencia política, ya que bajo el mandato de George W. Bush trabajó para el Departamento del Tesoro y como asesor de la Casa Blanca.
El presidente electo continuará esta semana con el particular proceso de selección de su futuro gabinete. Trump lleva desde el martes en su mansión Mar-A-Lago en Palm Beach (Florida) donde ha viajado con motivo de la festividad de Acción de Gracias. Desde allí, confirmó el nombramiento de las dos primeras mujeres de su gabinete. La multimillonaria conservadora y defensora de la educación privada Betsy DeVosserá su secretaria de Educación y la gobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, sin experiencia diplomática, la embajadora de EEUU ante la Organización de Naciones Unidas.